jueves, 22 de febrero de 2018

¡Bendito sea el fruto!

FICHA:
Título: El Cuento de la Criada
Autora: Margaret Atwood
Año de Publicación: 1985
Número de Páginas: 475
Género: Distopía
Sinopsis: En el estado de Gilead, donde tras una hecatombe nuclear, la población ha visto disminuida su capacidad de reproducción, las Criadas, vestidas con hábitos rojos de la cabeza a los pies, con el rostro cubierto por un velo transparente y enmarcado por una toca blanca, desempeñan una función esencial: concebir y dar a luz a futuros ciudadanos. Destinadas a esta empresa suprema, viven enclaustradas y reducidas a ser un cuerpo con una única misión: reproducirse. 

El Cuento de la Criada es una distopía ambientada en un futuro cercano, donde un gobierno teócrata se ha impuesto en Estados Unidos y ha creado una nación llamada Gilead, basado todo en un pasaje de la biblia. Este gobierno poco a poco comienza a imponerse como una dictadura y va cortando poco a poco los beneficios de las mujeres, primero privándolas de trabajo y progresivamente prohibiéndoles poseer propiedades y otros "lujos", hasta que terminan formando un grupo de castas entre estas, donde la desconfianza entre mujeres de las mismas castas es alentada por rumores falsos: Esposas. quienes mantienen el lugar más alto en la sociedad, están casadas con oficiales de alto nivel y son de alguna manera quienes "mandan" en el hogar: luego están las Hijas, quienes son niñas adoptadas o de clase alta; las Criadas, "máquinas de hacer bebés" para la alta sociedad y recluidas a su hogar, además de recibir cierto rechazo por ser quienes son; Marthas, mujeres estériles que tienen la labor de realizar actividades domésticas; las Tías, encargadas de entrenar y vigilar a las criadas y las Econoesposas,  quienes se casan con hombres de bajo rango y se espera que hagan todas las labores de las otras castas femeninas.

En Gilead vive Defred, una Criada que es llevada a casa del Comandante para darle un heredero. Pero más que ser una historia con una trama complicada nos encontramos con la trama distópica común, donde las victorias y acciones de los personajes son pequeñas. El libro más que nada nos cuenta la rutina de Defred y por medio de flashbacks su vida antes de que el gobierno impusiera el sistema de castas y de que Gilead existiera siquiera. Mientras sus pequeños actos de rebelión poco a poco e inocentemente amenazan con acabar con su vida y afectar la de los demás.

Es un libro simplemente maravilloso, con una historia llamativa y con un mensaje increíble, no me parece tanto feminista, pero en general para la sociedad a las consecuencias de buscar la creación de regímenes puritanos o fanáticos religiosos.

El Cuento de la Criada es una historia de desarrollo de personajes, más que de trama. Como digo mas arriba, el libro se centra principalmente en la rutina diaria de Defred y sus conflictos con su condición de, prácticamente, esclava sexual ante los ojos de Serena Joy, esposa del Comandante, las dos Marthas que trabajan en casa de Joy y obviamente, los turistas de países que ven las costumbres puritanas y retrógradas con gran curiosidad.

Fue  un libro que si bien tiene una narrativa floja a mi parecer y el enfoque medianamente deprimente y oscuro, disfruté la lectura y al final me dejó pensando seriamente en muchísimos aspectos de la sociedad moderna y como Atwood logra hacer esbozos caricaturescos y macabros de esta.

El Cuento de la Criada es una historia que discute seriamente la problemática de la situación a la que está sometida en algunas ocasiones la mujer, vista como una persona destinada al cuidado de su casa, a través de la imagen de las esposas; de su "obligación" para limpiar y cocinar, representada con las martas y la perspectiva de que en algunos lugares, no todos, una mujer incapaz de dar a luz, no está "completa", mientras brinda al lector además una brillante crítica a los problemas de las sociedades teócratas extremistas y a un gobierno que pudiera parecer medianamente comunista en la manera en la que este se representa.


Mi experiencia fue un poco lenta; tardé un buen tiempo en llegar tan solo a la mitad, pero mi mente estaba atrapada en la realidad oscura de Gilead, y aunque me hubiese aburrido y quisiera dejar la lectura, era imposible. Yo no había salido de Gilead, sólo lo haría al llegar a la última palabra, como digo dos párrafos mas arriba: ese último capítulo me dejó pensando. Además que es un libro con un final abierto, por lo que para mí fue difícil superar este libro (fue un proceso de un día, para mi eso es largo xD) y cuando lo hice leí El Principito, así que la depresión duró unos días más.

Aún espero poder ver la serie y sé que en Netflix no la voy a encontrar :´v

Sobre los personajes, debo decir que no me sentí apegada a ninguno de ellos, salvo tal vez un poco de preocupación por Defred y curiosidad sobre el Comandante, pero de resto ninguno me produjo empatía alguna.

Defred por su parte me pareció derrotista, desde un inicio y por razones que no puedo contar, tiene una personalidad demasiado sumisa, que no me parece justificable. Ella conoció el mundo antes de que este régimen se formara, está todo en la historia muy reciente como para que actúe como si jamás hubiese conocido otro estilo de vida. No es como Winston Smith en 1984, que nació en el mundo antes de que el Gran Hermano hiciera lo que hizo, Smith recuerda el mundo previo, pero sus padres son separados de él y pronto Winston es llevado a una casa donde lo adoctrinan. Me parece que en el caso de Defred es más difícil que algo así ocurriese, pues tuvo una vida entera antes del régimen en Estados Unidos, una hija, un marido. De todo.


En fin. Le doy 4/5. 

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